jueves, 1 de marzo de 2012

Un sol bajo un desierto

Soñé “siglos de piedra”
Y no me equivoqué
Ahora en el desierto
Mi sangre llueve
Me veo en un viñedo
Mis labios huelen
Un sol que sólo el sol
Postrado
Sueña con tus labios

Tus piernas también arden
Acaso sin frío
Un invierno cálido
Que mañana dirá
Estás equivocado

Cierto. Así sí
Te duele cómo
Esos labios arden
Magullas tu espera
Más te duele
Pero terminas inerme
Desesperada bajo un calor
Ardes sin saber qué te duele

Desconfiada, intentas un grito
Sólo una lágrima recorre tu esperanza
Pero no sabes bien a bien
Que tu dolor te alcanza
Y quisieras gritar
No puedes; callas y sollozas

La piedra vuelve a girar
Estamos en Paz
Aparente
Sigues dolida, atribulada
La poesía o palabras
A ti no te saben
El desierto no habla
Gira y susurra
Aúlla, no canta

El sol vuelve
Su marcha está
Casi quieta.

Chihuahua, Chih., marzo 1, 2012.
Luis Mendoza Lara